Graziela



VIAJE DE NOVIOS.

Lorena empezó con los preparativos de la boda más de un año antes de la fecha prevista. Daniel ya estaba aburrido de probar menús, ver invitaciones y hacer listas. A él  no le costaba decidirse pero su novia era la duda personificada en mujer, y recababa la opinión de familiares, amigas e incluso de compañeros de trabajo.  Resultaba  desesperante ver que  daba una importancia transcendental a cualquier nimiedad, el más mínimo detalle parecía primordial para su futuro.
            Afortunadamente la luna de miel no les causaría problemas, pues todos los amigos de la pareja se habían puesto de acuerdo y les regalarían el viaje, manteniendo en secreto el destino elegido hasta el mismo día de la boda. Ellos solo debían preparar el equipaje para estar fuera quince días, con ropa de verano. Además de eso  no conseguían sacarles ninguna información.
            Aún faltaban tres meses para el gran día y el novio se sentía al borde del infarto. Lorena estaba nerviosa, agotada, irritable y cualquier tema relacionado con el enlace desembocaba en una inevitable discusión, todo aquello parecía estar consumiéndola. Afortunadamente, ya quedaban muy pocas cosas pendientes y se iría serenando, cuando recibió la fatídica llamada.
        Hola cariño ¿Cómo está hoy mi chica? –respondió al ver la foto de su novia en la pequeña pantalla.
        No Daniel, yo soy  Marian, la compañera  de Lorena de la oficina. Verás…
        ¿Dónde está ella? ¿Ocurre algo? –preguntó nervioso.
        No te asustes, pero se la acaban llevar. Se ha desvanecido  y hemos llamado al 112. La llevan al Hospital Provincial. Ya he llamado a su madre. Van para allá.
        Pero que ha ocurrido, ¿se sentía mal? –dijo mientras cogía la chaqueta y las llaves el coche de encima de la mesa.
-          No, solo estaba cansada. Lo mismo es una bajada de azúcar o la tensión. Parecía normal, charlábamos y de pronto se ha desplomado –comentó nerviosa la amiga- Llámanos cuando sepáis algo y luego le llevo yo el móvil.
Se recuperó de aquel episodio pero había algo en la analítica que preocupó a los médicos desde el principio, y decidieron dejarla en observación y hacerle más pruebas. 
Todos los preparativos para el gran día fueron en vano. Se casaron inmediatamente en la capilla del hospital, por deseo expreso de Lorena, con los más allegados, ya que los médicos no podías dar un diagnostico y ella cada día estaba peor. Estaba convencida  de que no llegaría a la fecha prevista con vida.
Daniel estaba deshecho, no soportaba verla así, la situación le superaba; resultó que él era menos fuerte de lo que pensaba.
Cuando parecía que todas las esperanzas estaban perdidas el equipo médico que la atendía, de forma inesperada, encontró el origen de aquel extraño mal, como ocurre en la series de Dr. House, y con el tratamiento adecuado Lorena salió del hospital justo a tiempo de realizar el viaje de novios, que todo pensaron le vendría bien para terminar de recuperarse de aquella pesadilla.
Tomaron el avión con destino a una paradisíaca isla, donde vivieron una semana de absoluta felicidad, después, de forma inesperada la sombra del pasado reciente empezó a planear sobre la pareja.
Ella se mostraba distante, la corta pero dura enfermedad por la que  había pasado la había cambiado, ahora parecía ver la vida de manera diferente. Decía que necesita tiempo y espacio para aclarar sus ideas y después de muchas discusiones cuando llegó el momento de regresar al terminar las vacaciones para Daniel, ella decidió quedarse allí un par de semanas más. No se sentía con ánimo de meterse de lleno en ese futuro que habían construido juntos.
A su regreso el desconcertado marido explicó lo ocurrido a toda la familia. Quince días después volvió Lorena. Cuando él fue a recogerla la encontró radiante, su sonrisa resaltaba en tu tez bronceada y emanaba luz. Le pareció la imagen de un anuncio de serenidad y sintió que la quería más que nunca.

Ni siquiera se llegaron a instalar en su nuevo hogar. Ella había tomado una decisión, cambiar de vida. Además, quería el divorcio.
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1 Response
  1. PILARA Says:

    Lo que hace ver las cosas con otra perspectiva. ¡Vaya cambio!
    Y con lo que cuesta hoy en día una boda...
    My bien, Ángela.