MUSICOTERAPIA: UNA VIA PLENA DE POSIBILIDADES
El otro día me llegó la noticia de que habían concedido uno de los cinco premios que entrega Cadena 100, “Pie Derecho” a un grupo de musicoterapeutas, liderados por María Jesús del Olmo, directora del proyecto, por la labor que llevan a cabo mediante un programa de musicoterapia en el Hospital Infantil La Paz de Madrid, y quise saber más. (http://www.populartv.net/index.php/PopularTV/ver-programa/premios_pie_derecho_2009/)
Parece que la palabra “musicoterapia” ya lo dice todo, pero, ¿Qué es en realidad? ¿Cómo se aplica? ¿A quién va dirigida? ¿Qué efectos tiene? Estas y muchas otras preguntas han quedado perfectamente respondidas con toda la información que amablemente me facilitó Blanca Guillén (musicoterapeuta) al mostrarle mi interés por el tema.
Es el uso de la música y o elementos musicales (sonido, ritmo, armonía y melodía) por un musicoterapeuta especializado aplicado a una persona o grupo de personas en el proceso diseñado para facilitar y promover comunicación, relación, aprendizaje, movilización, expresión, organización y otros objetivos terapéuticos relevantes, con el fin de lograr cambios y satisfacer necesidades físicas, emocionales, mentales, sociales y cognitivas. La definición, realizada por la Federación Mundial de Musicoterapia, ya nos da una idea del amplio campo en el que se desarrolla esta terapia alternativa.
Aunque los efectos beneficiosos de la música y su utilización como tal se conocen desde antaño, pues hay escritos de culturas como la griega, romana o egipcia en los que se hace referencia a la misma, la musicoterapia como disciplina es de más reciente aparición. A principios del siglo XX en Estados Unidos, cuando los soldados regresaban de la guerra y eran ingresados en hospitales y unidades de atención psiquiátrica, el uso de la música y los resultados obtenidos para su recuperación, hizo que se realizara un estudio más sistemático del fenómeno y se estableció como disciplina.
Esta terapia se puede aplicar a cualquier edad, desde bebés hasta ancianos, aunque también se utiliza en mujeres embarazadas, por lo que sus efectos llegan incluso a notarse en periodos prenatales. Se ha comprobado mediante numerosos estudios su gran eficacia y que a más temprana edad actúa antes.
A modo de ejemplo, comentaré que en las unidades de neonatología de los hospitales en los que se trabaja con musicoterapia, los bebés prematuros que se benefician con estas sesiones consiguen ganar peso antes, necesitan menos oxígeno en las incubadoras, duermen más profundamente y son dados de alta con mayor rapidez. Hay que añadir que el principal problema de los niños que nacen antes de tiempo es el estrés, y que con la música les baja la frecuencia cardiaca, por eso resulta tan interesante la terapia para ellos.
La musicoterapia actúa a nivel fisiológico y psicológico, contándose entre sus efectos que modifica el ritmo respiratorio y cardíaco, la presión arterial y las ondas cerebrales; produce cambios en el tono muscular, la temperatura, el nivel de glucosa, la secreción hormonal, la dilatación de las pupilas y el sistema límbico; activa el hemisferio derecho del cerebro y estimula el trabajo conjunto de los dos hemisferios; ayuda a la regeneración de los tejidos; aumenta el nivel de resistencia al dolor; relaja o tonifica, según diferentes parámetros de la música; disminuye la fatiga y el estrés, etc. Favorece los procesos de comunicación, contacto y expresión de emociones, la integración y la cohesión grupal; desarrolla la capacidad de expresión; ayuda a que emerjan contenidos del subconsciente a la conciencia; estimula los procesos de catarsis; disminuye el sentimiento de soledad y facilita el contacto con ella; influye en el desarrollo de varios tipos de inteligencia; sirve de elemento proyectivo de la personalidad; tiene poder evocador, favorece la imaginación y la visualización, además de otros muchos efectos beneficiosos para la persona. Hay múltiples estudios a nivel médico, psicológicos que prueban y demuestran la efectividad de esta herramienta, gracias a la cual se da apoyo emocional, ayuda en el manejo del dolor y otros síntomas, en ansiedad y depresión, mejora el estado de ánimo y la calidad de vida, facilita la relajación y promueve una experiencia positiva y estética.
Según María Jesús del Olmo, responsable del programa de musicoterapia de la Paz y autora del trabajo de investigación, subdirectora del Master de Musicoterapia de la universidad Autónoma de Madrid, además del efecto lúdico de la música, sus beneficios van mucho más allá y puede aplicarse a cualquier paciente, adoptando los elementos musicales, como el ritmo o la melodía, a la respuesta que quiere obtenerse, eso es lo terapéutico.
Es un trabajo que desde fuera nos puede parecer duro a la vez que muy gratificante, pues el musicoterapeuta está en contacto con personas enfermas de cáncer, en este caso en concreto con niños, lo que puede resultar más doloroso, con enfermos terminales, ya que se utiliza también en cuidados paliativos, en centros de Alzheimer, con niños con trastornos del comportamiento y personas con alteraciones o enfermedades mentales. De cualquier modo, es importante saber que la gente que se dedica a esta profesión disfruta muchísimo de lo que hace y aprende constantemente de sus pacientes: el buen humor, la manera de relativizar las cosas, las ganas de vivir y de valorar lo importante de la vida... esto y muchas otros conceptos les son transmitidos por las personas a las que tratan y los familiares de estas; es algo de lo que se retroalimentan, algo mutuo. En una sesión no hay jefe, o distintos planos de jerarquías, si fuera así, el paciente no se podría sentir nunca en plenitud, pues siempre estaría abajo de alguna forma. Es cierto que los musicoterapeutas son guías, son el soporte para muchas de sus emociones, que facilitan la música para que haga de director del momento. Sienten que la música es un miembro más del grupo, no un instrumento a utilizar; de vez en cuando, es como si cobrara vida y se comunicara por encima, junto a ellos.
La terapia funciona como demuestra no sólo la impresión y la respuesta positiva, sino los datos clínicos contrastables, aunque todavía hoy está poco desarrollada en nuestro país, como se manifiesta en el boletín núm. 4 de noticias del Centro de Musicoterapia Anayet, es una magnífica herramienta para el desarrollo de las personas y la ampliación y mejora de sus capacidades.
Por todo lo expuesto, creo que puede resultar muy interesante ver el programa “Crónica” de TV-2, que se emitirá el próximo domingo 5 de abril, a las 21,30 horas, en el que durante cuarenta minutos podremos conocer más a fondo no es sólo el programa que se está llevando a cabo en el Hospital Infantil de La Paz, de Madrid, sino que veremos muestras de la musicoterapia de toda España, y más concretamente a nivel hospitalario.
Si se desea también puede visualizarse el link de España Directo, relacionado con el tema, con este enlace:
http://www.rtve.es/alacarta/todos/abecedario/E.html#462753
Ya sólo me queda agradecer a todos los terapeutas musicales o mejor dicho musicoterapeutas, como a ellos les gusta que les llamen, y a los responsables de los programas que se están aplicando, y desear que su labor se valore y reconozca, pueda extenderse y ampliarse para llegar cada vez a más gente y, con ello, beneficiarse de la ayuda que prestan.
Graziela E. Ugarte Muñoz
MUY BUEN REPORTAJE, INTERESANTÍSIMO Y ESPERANZADOR. ES GRATIFICANTE COMPROBAR QUE SE APLICAN TERAPIAS ALTERNATIVAS PARA HACER MÁS LLEVADERAS LAS PENURIAS HUMANAS Y QUE LA MEDICINA CONVENCIONAL ABRE SUS PUERTAS A OTRAS OPCIONES, QUE, EN EL PEOR DE LOS CASOS, NO PUEDEN HACER NINGÚN MAL. Y LA MÚSICA ES TAN GRATA...
No soy anónimo, me he equivocado. Muy bien la clave de sol.
Muy interesante esto de la musicoterapia, te entran ganas de ir a esa terapia y que te dejen como nueva, que faltita me va haciendo. Gracias, Graziela por estar siempre a la búsqueda de la armonía y además, darnos a conocer los caminos.
El programa de esta noche en TV-2 al que se hace referencia me ha dejado gratamente sorprendida al ver en vivo y en directo como funciona esta terapia y la cantidad de aplicaciones que tienes. Quiero felicitar a los musicoterapeutas para la gran labor que llevan a cabo cada día.