AÑORA SUS MANOS...
Añora
sus manos, la suavidad de sus dedos con el roce y la presión. Ella siempre fue
la más querida, y espera impaciente que vuelva a buscarla. Tiembla si piensa cómo
juntos interpretaban las melodías que les nacía de lo más profundo, del amor
que les unía. Él sabía como nadie transmitir esos sentimientos a los demás. La
emoción de la espera, su abrazo, cuando la iba templando. Le sentía tan cerca
que podía escuchar latir su corazón mientras las notas brotaban emocionadas
para invadir el aire, llenar el escenario y la sala entera. Gente de todo el
mundo ha disfrutado con ellos y sabe que es española y desde su nacimiento tuvo
vocación artística, aunque nunca llegó a imaginar que sería el mejor quien
tañera sus cuerdas. Ahora añora sus manos y aunque no la toque, imagina el roce
de sus dedos sin poder evitar que surja un triste quejido por la pena que la
embarga.
No sólo su guitarra estará triste; todos los que nos gusta la música, la excelente música que él maestro bordaba, lo estamos también. Al menos quedan sus grabaciones para seguir disfrutándole.
My bien, Ángela
Que bonito Graziela!!!
Un beso
Ana
Qué bello texto! Un precioso homenaje al maestro de la guitarra que lo añora.
Gracias.
Un beso
Preciso, la guitarra llora y nosotros también. Era nuestro muy nuestro, se nos ha ido, pero nos ha dejado su música para poder disfrutarla para siempre.
Felicidades, Graziela.
Nines